Lunes, 21 de junio de 2021 - ORACIÓN de 4º, 5º y 6º de Ed. Primaria

¡Buenos días!

Nos serenamos, hacemos silencio por dentro y por fuera, no permitas que nada ni nadie te distraiga en este momento tan importante.

Vamos dejando nuestro cuerpo cada vez más quieto. Nos sentamos correctamente, nuestra espalda recta, los pies tocando el suelo, enraizados con nuestro planeta que es regalo de Dios.

Cerramos nuestros ojos, y ponemos toda nuestra atención en la respiración… Cogemos aire, lo soltamos despacito… (3 veces)

Ahora, que nos encontramos tranquilos y serenos, podemos comenzar nuestra oración de la mañana:

EN EL NOMBRE DEL PADRE, DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO…

Hoy, como todos los lunes,  traemos a nuestra oración el Evangelio correspondiente al 12º Domingo de Tiempo Ordinario, que pudimos escuchar en la Eucaristía de ayer.

Todos tenemos cosas que nos ponen nerviosos o incluso que nos dan mucho miedo. En esos casos, ayuda mucho tener al lado a alguien que da CONFIANZA.
Vamos a empezar por eso mismo, tranquilizarnos y para ello intenta no distraerte con otros pensamientos y recuerda cuáles son esas cosas que te asustan y te alteran.
A lo mejor te has puesto algo nervioso al recordarlo pues para tranquilizarte imagina que alguien mayor se acerca con mucha calma para darte un abrazo que te llena de confianza, algo así es lo que hizo Jesús con sus amigos que, hoy, nos cuenta el Evangelista Marcos...

“Un día, al atardecer, Jesús dijo a sus discípulos: «¡Vamos a la otra orilla!» Porque se movían mucho por los pueblos que estaban alrededor del lago.

Entonces se subieron a una barca y se echaron a navegar. Pero de golpe se levantó un huracán. Era tremendo. Olas enormes y un viento tan fuerte que parecía que iba a volcar la barca. Los discípulos se morían de miedo. Pero Jesús estaba tan tranquilo que iba dormido y ni se enteraba. Entonces sus amigos le despertaron, y le dijeron: «Jesús, ¿no tienes miedo? ¿no te importa que nos hundamos?» Él se puso en pie y mandó al viento y a las olas parar. Se calmó todo de golpe. Y les dijo a sus amigos: «Pero, ¿todavía tenéis miedo? ¿aún no tenéis fe?»

Ellos estaban impresionados, y se miraban, y por lo bajo se preguntaban quién era Jesús, que hasta las aguas y el viento le obedecían.”

¡Es verdad! ¿Quién este Jesús que hasta las aguas y el viento le obedecen? ¿Cómo puede quedarse tan tranquilo en medio de un huracán?

Jesús tenía tanta CONFIANZA en el Buen Dios, que sabía que no podía pasarles nada. Y lo mejor es que estar al lado de Él te da algo de esa CONFIANZA.
Por eso a veces, Jesús, es como esa persona que se te acerca a ti a tranquilizarte con un abrazo.
Confías en Él y se te pasa el miedo.

Jesús, Tú me conoces bien, confiar en Ti me ayuda a no tener miedo…

DECIMOS TODOS JUNTOS...

Cuando, sin saber por qué, estoy triste o enfadado… CONFÍO EN TI, JESÚS.
Cuando pierdo la serenidad, y parece que tengo un huracán dentro… CONFÍO EN TI, JESÚS.
Cuando creo que todo me sale mal, me siento solo, triste… CONFÍO EN TI, JESÚS.
Cuando a mi alrededor todo es jaleo, confusión, y no sé qué hacer… CONFÍO EN TI, JESÚS

Terminamos nuestra oración, ORANDO todos juntos:

PADRE NUESTRO…

Beato Marcelo Spínola, acompáñanos en nuestro caminar.

María, Virgen de Loreto, llévanos a Jesús.