ORACIÓN DE LA MAÑANA (3º A 6º EP) - 15 DE OCTUBRE DE 2025
¡Buenos días!
Nos serenamos, hacemos silencio por dentro y por fuera, no permitas que nada ni nadie te distraiga en este momento tan importante.
Vamos dejando nuestro cuerpo cada vez más quieto. Nos sentamos correctamente, nuestra espalda recta, los pies tocando el suelo, enraizados con nuestro planeta que es regalo de Dios.
Cerramos nuestros ojos, y ponemos toda nuestra atención en la respiración… Cogemos aire, lo soltamos despacito… (3 veces)
Cae en la cuenta de que Dios está contigo, escuchando lo que hoy le quieres decir y esperando que también lo escuches a Él.
Y ahora, que nos encontramos tranquilos y serenos, podemos comenzar nuestra oración de la mañana:
EN EL NOMBRE DEL PADRE, DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO…
Esta mañana comenzamos cerrando los ojos y reflexionando sobre nuestro día de ayer. Piensa en todas las tareas que tuviste que hacer:
Te levantaste por la mañana, te lavaste la cara, viniste al cole, quizá comiste en casa o en el comedor, puede que tuvieras extraescolares, llegaste a casa y quizá hiciste deberes, te duchaste, cenaste y te fuiste a dormir.
¿Dónde estaba Dios en todo lo que hiciste?
Hoy celebramos a Santa Teresa de Jesús, doctora de la Iglesia, esto significa que es una persona que es ejemplo de fe y que seguir sus enseñanzas nos acerca a Dios.
La vida de Santa Teresa estuvo llena de aventura, de valentía y de fe. Escribió muchas obras de valor espiritual y literario que nos ha dejado Santa Teresa, pero esta mañana oramos con una frase: «entre los pucheros anda el Señor».
En el frenesí de su vida, Santa Teresa sabía encontrar a Dios también en la rutina, en lo cotidiano, en el día a día y en aquello que a veces es indiferente a nuestros ojos…
Vuelve a cerrar los ojos y a pensar en tu día de ayer… ¿Consigues ver a Dios en lo que hiciste?
Hoy le pedimos al Señor que aprendamos a sentir su presencia, como Santa Teresa, entre los fogones de nuestro día a día.
Beato Marcelo Spínola, acompáñanos en nuestro caminar.
María, Virgen de Loreto, llévanos a Jesús.
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