ORACIÓN DE LA MAÑANA (3º A 6º EP) - 30 DE ABRIL

¡Buenos días! 

Nos serenamos, hacemos silencio por dentro y por fuera, no permitas que nada ni nadie te distraiga en este momento tan importante. 

Vamos dejando nuestro cuerpo cada vez más quieto. Nos sentamos correctamente, nuestra espalda recta, los pies tocando el suelo, enraizados con nuestro planeta que es regalo de Dios. 

Cerramos nuestros ojos, y ponemos toda nuestra atención en la respiración… Cogemos aire, lo soltamos despacito… (3 veces) 

Cae en la cuenta de que Dios está contigo, escuchando lo que hoy le quieres decir y esperando que también lo escuches a Él. 

Y ahora, que nos encontramos tranquilos y serenos, podemos comenzar nuestra oración de la mañana: 

EN EL NOMBRE DEL PADRE, DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO… 


Esta semana hemos vivido días extraños, días raros. Cuando la luz se fue, se vieron afectados los transportes, los trabajos, los comercios, bares y restaurantes.


También los móviles dejaron de funcionar con normalidad y fue entonces cuando levantamos los ojos de las pantallas y nos miramos a los ojos. Fue cuando, como no había nada más que hacer, los parques se llenaron de jóvenes que charlaban y reían, que no miraban sus pantallas o jugaban a videojuegos.


 El ritmo de la ciudad disminuyó, las personas salieron a pasear y a charlar, a disfrutar de un rato juntos, conversar entre ellos…


Con el día de ayer en mente, escuchamos el Evangelio de San Mateo:


Vosotros sois la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad situada en lo alto de un monte; ni se enciende un candil para meterlo debajo del perol, sino para ponerlo en el candelero y que alumbre a todos los de casa. Alumbre también vuestra luz a los hombres; que vean el bien que hacéis y glorifiquen a vuestro Padre del Cielo.


Este fragmento del Evangelio nos hace mirar con otros ojos lo que vivimos el lunes. ¿Eres consciente de que tu alegría, tu acompañar a quien tienes al lado es luz para el mundo?

¿Hay cosas que crees que iluminan tu vida pero que, en realidad, no ayudan a tu felicidad?



Terminamos rezando todos juntos… PADRE NUESTRO, QUE ESTÁS EN LOS CIELOS…

Beato Marcelo Spínola, acompáñanos en nuestro caminar.

María, Virgen de Loreto, llévanos a Jesús.





Comentarios

Entradas populares