ORACIÓN DE LA MAÑANA (ESO Y BTO) - 9 DE DICIEMBRE
Empezamos nuestra oración haciendo silencio por dentro y por fuera, que nada ni nadie nos distraiga en este momento tan importante.
Vamos dejando nuestro cuerpo cada vez más quieto. Nos sentamos correctamente, nuestra espalda recta, los pies tocando el suelo, enraizados con nuestro planeta que es regalo de Dios.
Cerramos nuestros ojos, y ponemos toda nuestra atención en la respiración… Cogemos aire, lo soltamos despacito… (3 veces).
EN EL NOMBRE DEL PADRE, DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO…
Comenzamos la mañana escuchando el Evangelio de san Mateo:
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«¿Qué os parece? Suponed que un hombre tiene cien ovejas: si una se le pierde, ¿no deja las noventa y nueve en el monte y va en busca de la perdida? Y si la encuentra, en verdad os digo que se alegra más por ella que por las noventa y nueve que no se habían extraviado.
Igualmente, no es voluntad de vuestro Padre que está en el cielo que se pierda ni uno de estos pequeños».
Este evangelio nos recuerda que el amor de Dios no es estadístico: no se conforma con la mayoría, sino que se conmueve por cada persona en particular. Para Jesús, cada vida es única, no dar a nadie por “perdido”.
La alegría del pastor al encontrar a la oveja muestra que Dios celebra cada pequeño paso que damos, incluso cuando nosotros mismos creemos que no vale la pena.
¿Qué personas saldrían hoy a buscarte, mostrando la misma paciencia y ternura que Jesús enseña en este evangelio?
El propósito de hoy es que haciéndonos conscientes de que siempre hay alguien que no nos abandona, compartas tus preocupaciones con alguien que siempre está ahí para ti, Dios actúa a través de los otros.
Terminamos la oración EN EL NOMBRE DEL PADRE, DEL HIJO Y DEL ESPÍRITU SANTO…


Comentarios
Publicar un comentario